El manejo de la estenosis compleja de uretra ha cambiado de manera significativa en los últimos años. Las técnicas de injerto se consideran en la actualidad la primera elección, ya que la elevada tasa de recurrencia de la uretrotomía interna (70%) y los buenos resultados obtenidos en el tratamiento de las estenosis largas y complejas a cualquier nivel de la uretra con la uretroplastía dorsal con injerto libre de mucosa oral, han motivado que en la actualidad se considere el estándar de oro de las técnicas de injerto. El uso de la mucosa oral para el tratamiento de la estenosis de uretra fue descrito por primera vez por Kasaby en 1993, sin embargo la técnica de la uretroplastía dorsal con injerto libre de mucosa, fue descrita hasta 1995 por Guido Barbagli y desde entonces, los resultados obtenidos a largo plazo demuestran una tasa de éxitos del 92% a 97%. Posteriormente en 1996, Morey y McAninch describieron la técnica con injerto libre de mucosa oral ventral, para estenosis bulbares de 2 a 5 cm. La mucosa oral presenta importantes ventajas sobre los injertos cutáneos, ya que está disponible en todos los pacientes, es un epitelio húmedo, se puede tomar fácilmente, es de fácil manipulación quirúrgica, se puede adelgazar sin dañar su vascularidad, tiene propiedades inmunológicas haciéndolo menos propenso a infecciones, y es más resistente a recurrencias de estenosis que la piel. Además, tiene una submucosa con una red capilar densa, que facilita la pronta imbibición de nutrientes desde el lecho del tejido y permite una neovascularización temprana.
Se considera ventajoso el abordaje dorsal sobre el ventral y lateral, ya que el cuerpo esponjoso a este nivel es de menor grosor, además que la fijación de la mucosa bucal a los cuerpos cavernosos disminuye la retracción del injerto, facilitándose la neovascularización y evitándose el riesgo de saculación, fístulas y de reestenosis.
Por otra parte, en el abordaje ventral, al carecer de un soporte rígido y estable, el injerto corre el riesgo de sacularse dando lugar a goteo posmiccional, infecciones y trastornos eyaculatorios.
Respecto al sitio de elección para extraer la mucosa oral a injertar, existe la opción de obtenerla de la región del carrillo anterior al conducto de Stenon o de la región del labio inferior, dependiendo de la longitud de uretra requerida para realizar la plastía, sin embargo la mayoría opta por la mucosa del carrillo debido a que ésta presenta una mejor consistencia facilitando su manipulación en comparación con la del labio inferior.